Xiomara Castro evalúa construcción de moderno
laboratorio y búnker oncológico en el Hospital San Felipe
Estas obras son parte de la refundación en el área de la
salud y beneficiarán a alrededor de un millón de
hondureños
La presidenta Xiomara Castro supervisó hoy el avance de la
construcción del búnker oncológico y el nuevo Laboratorio Nacional de
Vigilancia de la Salud, obras ubicadas en el legendario hospital “San
Felipe”, cuyos servicios beneficiarán a alrededor de un millón de
pacientes.
Estos proyectos se suman a la edificación de los ocho hospitales nuevos
y a la reparación de 68 centros de estabilización que- a nivel nacionalimpulsa el Gobierno del Socialismo Democrático y son parte de la
refundación en el área de la salud.
El Laboratorio Nacional de Vigilancia de la Salud tiene un costo de
alrededor de 333 millones de lempiras de los cuales el gobierno de Japón
donó 275 millones (11 millones de dólares) y una contraparte nacional de
48 millones.
Este espacio cumplirá con los estándares internacionales que regulan
los laboratorios que permitirá fortalecer la capacidad de diagnóstico
de enfermedades.
El edificio de tres niveles tendrá áreas para instalar 10 refrigeradoras
de dos puertas corredizas, dos congeladores de menos 30 grados
centígrados y cinco ultra congeladores de menos 80 grados
centígrados.
El búnker
El otro proyecto, ubicado a pocos metros del laboratorio, es el esperado
búnker oncológico mediante el cual el Estado podrá brindar a los
pacientes de cáncer, y bajo estándares internacionales, el blindaje
radiológico.
En este lugar se instalarán por primera vez dos aceleradores lineales,
que son máquinas que “destruyen las células cancerosas sin afectar el
tejido normal circundante”, según los principios científicos.
La obra tiene un costo de alrededor de 43.7 millones de lempiras, que
son fondos nacionales canalizados a través de la Secretaría de Salud
(Sesal) y el Fondo Hondureño de Inversión Social (FHIS), ente ejecutor.
Xiomara agradecida y contenta
La Presidenta de la República se mostró contenta por el avance de
estas dos obras y expresó su agradecimiento al gobierno de Japón por
su valiosa ayuda no solo en el campo de la salud, sino también en
infraestructura.
“Hay muestras suficientes de los pasos firmes que estamos dando para
modernizar el sistema de salud en nuestro país”, afirmó la mandataria.
“El acelerador lineal es una esperanza y bienestar para miles de
personas que padecen de cáncer, es un tratamiento muy específico que
llegará a estas personas y que su efecto será muy mínimo”, añadió.
Dijo que estas obras, y las otras a nivel nacional, “son cambios radicales
que estamos haciendo” y manifestó su firmeza al hecho de que
“estamos llegando a reconstruir y a refundir la salud en nuestro país”.
“Hoy quiero dejar claro a la población que esta construcción va a
quedar equipada y con el recurso humano, con los medicamentos que
se necesitan para el funcionamiento total y para la atención del
pueblo”, dijo.
Por su parte, el embajador de Japón, Jun Nakahara, declaró que el
Laboratorio Nacional de Vigilancia de la Salud, “cumplirá con todos los
estándares internacionales” y destacó que su inauguración este año
coincidirá con la conmemoración de los 90 años de relaciones
diplomáticas entre Honduras y Japón.
La presidenta Castro hizo la supervisión acompañada del secretario
privado Héctor Manuel Zelaya; la ministra de salud Carla Paredes, el
titular del FHIS Warren Ochoa y Jun Nakahara, jefe de la misión
diplomática de Japón