En un evento realizado en Siguatepeque, que marcó un hito en la interacción entre la política y el sector laboral, la precandidata presidencial de Libertad y Refundación (LIBRE), Rixi Moncada, participó en la Asamblea General de la Cooperativa Mixta de Trabajadores de la Fabricación de Bebidas y Afines (COMITRAFABAL), demostrando su compromiso con los trabajadores de Honduras. La asamblea contó con una nutrida participación de miembros de STIBYS en el año en dónde se celebrará su 70º aniversario.
La presencia de Moncada en este evento fue recibida con gran entusiasmo por los trabajadores de COMITRAFABAL, que agrupa a trabajadores importantes empresas «Es un alto honor contar con Rixi Moncada en nuestra asamblea, un reflejo de su compromiso con la clase obrera», expresó el vocero de la Comisión Negociadora de STIBYS.
Maria Elena Sabillon, representante de STIBYS, destacó la conexión personal y la empatía que siente por Moncada, viéndola como un reflejo de su propia lucha en la defensa de los derechos laborales. «Rixi Moncada, como mujer y abogada, simboliza la lucha incansable por la justicia social», señaló Sabillon.
Carlos H. Reyes, presidente del STIBYS, en su intervención, hizo un llamado a la unidad y la mejora continua para enfrentar los retos impuestos por las políticas neoliberales, destacando el papel crucial de Moncada en este esfuerzo. «Nuestra lucha por mantener las conquistas sociales es diaria, y la presencia de Rixi aquí refuerza nuestra determinación», afirmó Reyes.
Francisco Javier Oviedo, presidente de COMITRAFABAL, dio la bienvenida a Moncada, resaltando la importancia de su apoyo en la consolidación de los derechos y mejoras para los trabajadores del sector de bebidas y afines.
La abogada Rixi Moncada inició su participación agradeciendo la oportunidad de dialogar con los trabajadores, reconociendo su valor como la verdadera riqueza de la nación. «Los trabajadores son el corazón de Honduras, y debemos proteger sus derechos y su bienestar como nuestro más preciado tesoro», enfatizó Moncada.
Refiriéndose a su historia familiar, Moncada compartió la experiencia de su padre, quien trabajó durante 50 años sin poder jubilarse dignamente. «Esta realidad refleja la lucha de muchos trabajadores en Honduras, una lucha que debe ser reconocida y apoyada por todos», expresó Moncada.
La precandidata hizo un llamado a la acción, instando a la clase trabajadora a continuar defendiendo sus conquistas y a no separar lo social de lo político. «Es esencial mantener viva la llama de la resistencia y la lucha por la justicia en cada acción que emprendemos», dijo Moncada.
Durante su intervención, Rixi Moncada instó a la audiencia a «decodificar el discurso de las transnacionales y las grandes empresas» que alegan que la eliminación de los derechos laborales es necesaria para la creación de empleo. Moncada desmintió enfáticamente esta narrativa, declarando que «es una mentira, una falacia que quitar conquistas laborales y sociales genera más empleo». Con vehemencia, señaló cómo, día tras día, se perpetúa un ataque coordinado contra la clase trabajadora mediante fraudes legales y la corrupción que entrelaza lo público y lo privado, subrayando que durante el último gobierno, se legalizaron medidas que socavaron los derechos laborales forjados a través de intensas luchas. «Ellos luchan cada día por disminuir los empleos», enfatizó Moncada, destacando la importancia vital de reconocer y contrarrestar estas estrategias que buscan debilitar los cimientos de la justicia laboral en Honduras.
La precandidata también se refirió a las estrategias utilizadas por ciertos sectores para mermar la fuerza laboral y sus conquistas, apuntando a prácticas como el fraude de ley y la corrupción que vincula al sector público con el privado. Moncada recordó cómo, durante los últimos 12 años y 7 meses, se promulgaron leyes que atentaron contra los derechos laborales históricamente ganados, enfatizando que este tipo de políticas no solo debilita la posición de los trabajadores, sino que también afecta la calidad y estabilidad del empleo en el país. Su llamado a resistir estos esfuerzos subraya la necesidad de un frente unido en defensa de los derechos laborales y la dignidad de la clase trabajadora hondureña.
Moncada también criticó las políticas que han favorecido la corrupción y la privatización en detrimento de los trabajadores, subrayando la necesidad de desmantelar estas estructuras para construir un futuro más justo. «Debemos erradicar la corrupción legalizada y trabajar unidos por un Honduras que valore y respete a sus trabajadores», afirmó.
Rixi Moncada profundizó en cómo la fase crítica de la privatización durante el gobierno anterior culminó con la transferencia de fondos estatales a entidades bancarias privadas mediante fideicomisos, situación que ella misma enfrentó al asumir como Ministra de Finanzas en 2022. Al tomar el cargo, descubrió una realidad desoladora: las arcas del Estado estaban vacías, y la Caja Única del Estado había sido drenada en el curso de los 12 años y siete meses de un régimen marcado por políticas que favorecieron la privatización y el desvío de recursos públicos hacia el sector privado. Esta revelación, compartida en la asamblea, resonó profundamente entre los trabajadores, quienes respondieron con un fuerte aplauso, validando su crítica a las políticas que comprometieron la soberanía económica de Honduras.
En su cierre, Moncada reafirmó su compromiso con la clase trabajadora, asegurando que su gobierno fortalecería los derechos laborales y sociales, honrando la memoria y el esfuerzo de los mártires y luchadores que han marcado el camino. «Juntos, construiremos un país que ponga en primer lugar el bienestar y la dignidad de cada trabajador hondureño», concluyó Moncada, recibiendo el aplauso y el apoyo de los presentes en la asamblea.
