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Irlanda se prepara para celebrar la canonización del «santo patrono de la PlayStation»

La iglesia de San Pablo en Arran Quay, Dublín, transmitirá en vivo la canonización el 27 de abril.
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Varias parroquias eclesiásticas de Irlanda están preparándose para celebrar ampliamente en abril la canonización del adolescente italiano Carlo Acutis, conocido como «santo patrono de la PlayStation», que murió de leucemia en 2006 a los 15 años de edad, recogen medios locales.

Durante 2024, la reliquia principal del joven realizó varias visitas a distintas diócesis de Irlanda desde Asís (Italia). Asimismo, la organización Carlo Acutis Youth Ireland, formada hace más de un año, ha visitado escuelas y otras instituciones en todo el país para crear conciencia y dar a conocer más sobre el futuro santo.

A principios de este mes, el santuario del joven fue bendecido en la diócesis de Waterford y Lismore durante la celebración de una misa por la próxima canonización del beato Carlo Acutis, que tendrá lugar del 25 al 27 de abril en la basílica de San Pedro del Vaticano en el marco del jubileo de los Adolescentes, según anunció el papa Francisco.

La iglesia de San Pablo en Arran Quay, Dublín, transmitirá en vivo la canonización el 27 de abril. Además, se están preparando varios eventos que se llevarán a cabo en todo el país para conmemorar la santificación.

El primer santo milenial

En abril, Acutis pasará a la historia como el primer santo milenial del mundo. Su camino hacia la santidad inició en 2020, cuando fue beatificado después de que el papa le reconociera un milagro ocurrido en Brasil en 2018. El adolescente solía jugar mucho y pasaba mucho tiempo en los servicios religiosos, y especialmente en los sacramentos de la comunión y la confesión. También creó una página web con un catálogo de milagros registrados oficialmente.

La tumba abierta de Acutis se encuentra en el Santuario de la Expoliación en el municipio italiano de Asís, vestido con una sudadera y zapatillas deportivas. Cuando fue exhumado para su beatificación 14 años después de su muerte, sus restos se encontraban en aparente perfecto estado.

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