Una plaga de caracoles terrestres africanos gigantes en la ciudad de Miramar (Florida, EE.UU.) empujó a las autoridades a decretar una cuarentena en el condado de Broward el martes de esta semana, informa la cadena NBC.
La medida prohíbe mover caracoles, plantas, abono, tierra o materiales de construcción a través o desde el área de cuarentena.
El ‘Lissachatina fulica’ es una especie de caracol que puede llegar a medir unos 30 cm de largo y consume más de 500 tipos diferentes de plantas, según el Departamento de Agricultura y Servicios al Consumidor de Florida (FDACS, por sus siglas en inglés).
Puede ser devastador para la agricultura del estado, ya que «causa grandes daños en los ambientes tropicales y subtropicales», advierte el departamento.
Además de devastar plantaciones, el molusco también representa un «riesgo grave para la salud de los humanos» al poder portar el parásito ‘Angiostrongylus cantonensis’, también conocido como gusano pulmonar de la rata, que puede trasmitir a humanos enfermedades cerebrales tan graves como la meningitis.
El área en cuarentena está siendo tratada con un pesticida contra los moluscos llamado metaldehído, que, según la FDACS, está aprobado por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos para uso residencial.
El metaldehído interrumpe la capacidad de producción de moco de los caracoles y las babosas que, al consumirlo, se hacen susceptibles a la deshidratación, explica en un comunicado el FDACS.