No debe permitirse que el mundo se separe en bloques, señaló este martes en la cumbre del G20 Kristalina Georgieva, directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), citada por EFE.
«Hemos calculado que un mundo dividido perdería al menos el 1.5 % del PIB anual. Y el costo sería mucho mayor, dos veces mayor o más para economías abiertas, aquellas que dependen de la cooperación internacional», explicó Georgieva. Agregó que los «signos esperanzadores de recuperación» después de la pandemia del covid-19 fueron sustituidos por una «abrupta desaceleración» causada por el conflicto en Ucrania y los desastres naturales, lo que «hizo subir los precios y condujo a un endurecimiento de las condiciones financieras».
Además, Georgieva apuntó que la capacidad de una cuarta parte de los países emergentes y del 60 % de los estados con bajos ingresos «para lidiar con la inseguridad alimentaria y energética» disminuyó dramáticamente. Para corregir la situación, el FMI aconsejó levantar todas las barreras comerciales, en particular para alimentos y fertilizantes. «No debemos permitir que eche raíces el proteccionismo y que el mundo se convierta en bloques separados», destacó Georgieva.
Asimismo, la directora del FMI exigió que los países inviertan «en una agricultura resistente al clima y un desarrollo bajo en carbono», gracias a que «podemos tener estándares de vida más altos para las personas en todas partes». Concluyó su discurso agradeciendo al G20 los «pasos al frente» dados durante previas crisis y alentó a «ayudar a enfrentar los difíciles desafíos que enfrenta el mundo ahora».
El sábado pasado Georgieva advirtió de que la economía mundial se está dividiendo en bloques adversarios debido a la rivalidad entre EE.UU. y China, lo que podría conducir a una nueva guerra fría.