El fabricante de medicamentos Pfizer dijo el viernes que, cuando los contratos gubernamentales lleguen a su fin —posiblemente a principios del año que viene—, su vacuna contra el covid-19 se venderá a un precio de entre US$ 110 y US$ 130 por dosis.
Este modelo de precios se debe al aumento de los costes de distribución, así como al cambio previsto de viales multidosis a monodosis.
Este es el «precio de lista comercial», pero la empresa dice que no prevé que la mayoría de la gente tenga que pagarlo de su bolsillo. También señaló su programa de asistencia al paciente, que ayuda a las personas sin seguro a obtener las vacunas.
Por ahora, las vacunas contra el covid-19 siguen estando disponibles de forma gratuita. Pfizer afirma que prevé que el precio de la vacuna pueda entrar en juego cuando la distribución y el reembolso pasen de los contratos gubernamentales al sistema sanitario tradicional, ya en el primer trimestre de 2023.
Un análisis publicado por la Kaiser Family Foundation esta semana señala que, sin financiación o protecciones adicionales, la comercialización de la vacuna contra el covid-19 crearía barreras de acceso a las vacunas, las pruebas y las terapias, especialmente para las personas sin seguro o con un seguro insuficiente.
Ninguno de los dos cambios se ha producido aún. La declaración de emergencia de salud pública se renovó la semana pasada por otros 90 días, pero el Congreso aún no ha actuado sobre la solicitud de la administración de Biden de miles de millones más de dólares de fondos para garantizar un suministro constante y accesible de medidas contra el covid